Estamos muy familiarizados con los términos: champú, gel, mascarilla, aceite, suavizante.. pero, ¿no piensas que pudiera faltar algo? Pues efectivamente, nos falta la manteca corporal en el baño, los que la hemos probado, no entendemos cómo no llevamos años utilizándola.
Yo soy de las que salen de la cama y van directas a la ducha, bueno, ejem… casi directas. En la ducha aprovecho también para lavarme la cara y con la manteca corporal tengo todo resuelto. Pasar la mano ligeramente por el bote de manteca es más que suficiente para obtener la cantidad necesaria para dejar mi cara perfecta. Higiene íntima, perfecta, igualmente. Con la esponja escurrida (siempre super suave, como ya hemos comentado otras veces) lo mismo que hice con la mano: ligeramente sobre la manteca corporal, sin llevarme producto que así me dura más (varios meses) y tampoco es necesario.
Qué forma más estupenda de empezar el día!! Perfecta higiene, suave aroma a rosas y sobre todo hidratación, nutrición y protección para todo el día.
La manteca corporal es todo un lujo desconocido. A base de glicerina, aceite de coco, manteca de cacao y el componente estrella: el Aloe Vera, en su forma más pura y natural, directamente de la hoja. No creo que exista ningún producto mejor, debajo del agua, para la piel.
Su textura única y envasada en su cajita, hacen que se pueda llevar de viaje cubriendo todas las necesidades de higiene en un solo producto. (Descartamos el pelo eso, de momento, no está incluido)
Lánzate a por ella!